Hoy os traigo una entrada muy especial pues ni la he escrito sola ni mi acompañante esta vez es Helena. En esta ocasión mi compañera es Cristina, una vieja amiga (tanto mía como de Helena) y al igual que yo friki hasta la médula.
El pasado fin de semana fuimos a la Expotaku de Salamanca y hoy os traemos nuestra opinión acerca de esta.
Salamanca no es una ciudad grande y boyante de eventos
(sobre todo eventos frikis), por ello nuestras expectativas sobre la Otakucon de este
año no eran muy altas. Como resultado de esto, nos sorprendimos gratamente al ver
gente con sus pintas de frikillos de calle, sus cosplays caseros y sus
camisetas y gorros de sus animes y mangas favoritos. Pero empecemos por el
principio.
La Otakucon se celebró en el Multiusos Sánchez Paraíso. Al
llegar, vimos que la entrada valía 5 euros: nada de lo que sorprenderse, en mi
opinión es lo mínimo que se suele pagar por entrar a este tipo de sitios, en
ciudades más grandes como Granada podrían ser 8 euros e incluso en Barcelona se
llegaría a 10. Para llegar a los puestos y exposiciones, se baja por una rampa
inmensa desde la que se pueden gozar unas buenas vistas de todo lo que te
pueden esperar y hacerse una idea de cómo planificar tu recorrido (punto
positivo para el arquitecto del Multiusos). Además, unas chicas muy majas nos
guardaron los abrigos y paraguas (caía un chaparrón inmenso) por un euro muy
bien empleado.
La verdad es que echamos en falta más exposiciones de cosplays
y figuras, y que pusieran carteles para identificar el anime/manga de cada uno
(que tampoco somos unas frikis profundas que se conozcan todo).
Los puestos estaban muy bien organizados, en el centro del espacio, mientras que en los laterales había mesas de grupos o asociaciones sobre muchísimas cosas (más adelante destacaré alguno). En otro lateral estaba el escenario, desde el que se avisaba con antelación sobre cualquier taller, exhibición, charla… los asistentes también contábamos con un humilde puesto de ramen instantáneo ciertamente poco agradable a la vista y perritos calientes que yo consideré mejor opción. A no ser que fueras una de las poquísimas 10 personas que se apuntó al taller de sushi o te trajeras comida de casa, no tenías más para llevarte a la boca.
Había talleres muy interesantes enfocados al cosplay, cultura japonesa (origami, sushi...), hasta uno de complementos de quidditch (al que no pudimos asistir desgraciadamente).
En cuanto a los puestos, nos encontramos con gran cantidad de
artículos a cual más generador de nuestros grititos de fans histéricas, lo cual nos llenó de felicidad. Los precios sumamente bajos de los posters
en especial nos sorprendieron (rondaban los 2-3 eurillos, cuando en una tienda o
por internet no bajan de los 10-12 euros). La gente muy maja, había hasta
vendedores muy salaos de Sevilla. En muchísimos puestos estaba el típico juego
de probar suerte en el que con un euro metías la mano y dependiendo de la
fichita que cogieras, te llevabas una chapa, un póster, un vale de 20 euros… Creo
recordar que probé suerte 4 veces, y de esas, en todas me tocó un articulito de
1 euro (vaya casualidad…). 
Nos gustaría destacar a los que, orgullosos, nos dijeron que eran las personitas que constituían el primer equipo de quidditch de Castilla y León. Eran unos chicos muy majos, que no dudaron en charlar con nosotras y explicarnos todas las preguntas a las que les sometimos. Tenían un test (sobre el mundo mágico, obviamente), en base al cual te asignaban tu legítima varita. Las varitas estaba hechas por ellos con mucho cariño, al igual que la caja de Olivander’s.
Por si os interesa, las varitas que nos tocaron, de haberlas ido a comprar tras un buen paseo por el callejón Diagón, serían:
- Para Cristina de roble rojo y núcleo de pluma de fénix.
- Para Fatt de Arce y núcleo de pelo de unicornio.
Cristina se llevó unas buenas chapas, un póster genial de Nico Robin,
una estupenda varita y un llavero de Luffy.
Fat se llevó unas chapas, otra estupenda varita, un parche de Slytherin y un poster de Pesadilla antes de navidad.
Pero sobre todo ambas no llevamos unas ganas tremendas de volver el año que viene.
Esperamos que os haya gustado esta entrada. No dudéis en comentar. Hasta la próxima entrada.
Un beso :)
Fatt Y Cris
Fat se llevó unas chapas, otra estupenda varita, un parche de Slytherin y un poster de Pesadilla antes de navidad.
Pero sobre todo ambas no llevamos unas ganas tremendas de volver el año que viene.
Esperamos que os haya gustado esta entrada. No dudéis en comentar. Hasta la próxima entrada.
Un beso :)
Fatt Y Cris
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